LAS MERINDADES
Cuando conozcas las Merindades, sus contrastados paisajes, de sus variados bosques de sus ríos con limpias aguas, te impresionarán muy gratamente
El destino posee rincones mágicos con interesantes ermitas románicas, esbeltos torreones y castillos además de otros tesoros patrimoniales.
La tranquilidad de sus pueblos, sus vivas raíces, su apetitosa gastronomía y el encanto de sus gentes, hacen de las Merindades un lugar ideal para realizar actividades de senderismo..
La diversidad vegetal existente origina un variado colorido en el medio natural, atractivo en todas las estaciones del año que conforman un atractivo paisaje con amplias depresiones y desolados páramos; valles glaciares y escarpadas montañas; grandes cavidades y desafiantes desfiladeros; saltos de aguas y caudalosos ríos; bosques autóctonos y empinadas praderas.


OJO GUAREÑA
Al norte de la provincia de Burgos, encontraremos Ojo Guareña. El Monumento Natural de Ojo Guareña es una figura protegida.
Declarado Bien de Interés Cultural  en 1970 y Lugar de Importancia Comunitaria  dentro de la Red Natura 2000. La principal característica geomorfológica es su relieve de cuestas formando un cejo calizo, que divide dos regiones biogeográficas bien diferenciadas, la Región Eurosiberiana y la Región Mediterránea. En la primera se corresponde con la zona norte donde se encuentran los Montes de Somo lugar de nacimiento de los ríos y arroyos que atravesando el verde valle han llegado hasta el cejo calizo y han formado la mayor red de cavidades conocida en España y una de las más importantes de Europa y del mundo. Los ríos Guareña y Trema se sumen en sumideros para luego circular por el interior de las galerías formando un laberinto de cuevas y resurgir al exterior kilómetros más abajo. En la zona sur o región Mediterránea nos encontramos con valles pequeños dedicados al cultivo de cereal, pastizales artificiales, patatales, etc.
Ojo Guareña, por su particular situación geográfica, confiere al espacio gran diversidad de formaciones vegetales tanto arbóreas (robledales, rebollares, hayedos, encinares y quejigares), arbustivas (enebrales, encinares) o herbáceas (prados naturales y pastizales) que presentan, en general, un buen estado de conservación. En las zonas de ribera encontramos entre otros avellanos, alisos, chopos, álamos.
Este espacio presenta gran diversidad de especies de fauna, de las que destacamos las aves nidificantes que aprovechan los cantiles rocosos, como el águila real, el alimoche y los buitres leonados, también otras aves forestales como el azor, el gavilán, el halcón peregrino, el águila culebrera, o las rapaces nocturnas como el cárabo o el búho real. Los mamíferos también están presentes en este espacio como el desmán de los pirineos, el lirón careto, la marta, la gineta, el gato montes, el jabalí, el corzo y la presencia puntual del lobo. Los murciélagos utilizan las cuevas como área de cría, refugio invernal o área de reposo.
La fauna más importante la encontramos en el interior de la Cuevas de Ojo Guareña, que hasta la fecha se han descubierto 115 especies, y publicado 16 especies endémicas de Ojo Guareña.



ERMITA DE SAN BERNABE
San Bernabé, es un pequeño templo semi-rupestre con una nave y altar. La pieza más antigua es la bóveda de cañón apuntada que data del siglo XIII. En los siglos XVIII y XIX, se decoró con pinturas murales que cuentan la vida y los milagros de San Tirso. Aluden, entre otras cosas, al martirio del santo y a su intercesión que salvaba la vida a los que se despeñaban por este cortado rocoso.
Ojo Guareña está situado en la vertiente meridional burgalesa de la Cordillera Cantábrica, con más de 100 kilómetros de galerías, uno de los mayores complejos de cuevas del mundo. Burgos, Castilla y León.
Es, además, un importante yacimiento arqueológico con registros que abarcan desde el Paleolítico Medio a la Edad Media. Entre ellos destacan las muestras de arte rupreste, los grabados y las improntas de pies descalzos dejadas por un grupo humano del paleolítico. Aunque el Complejo Kárstico de Ojo Guareña tiene 18 entradas principales, únicamente se puede acceder a través de la Cueva y Ermita de San Tirso y San Bernabé, situadas en el enclave paisajístico e histórico más emblemático de la zona.